Una placa solar es un dispositivo que se nutre de la energía del sol para generar electricidad o calor. No todos los paneles solares son iguales ni tampoco realizan las mismas funciones. De hecho, hay qué tener muy claro para qué se necesita un panel solar y elegir el más adecuado para ello. Y es que, dependiendo de la función que vayan a realizar, las placas solares se pueden clasificar en placas solares fotovoltaicas, placas solares térmicas o placas solares híbridas. Quédate a leer este post e infórmate de los tipos de placas solares que existen y los beneficios de cada una de ellas, ¡adelante!
Tipos de placas solares: características
Un panel solar fotovoltaico es un módulo compuesto por células solares encargadas de convertir en electricidad los fotones que proceden de la luz solar. Por otro lado, una placa solar térmica es la que aprovecha la energía contenida en la radiación del sol para transformarla en energía térmica. Estamos hablando de un tipo de energía renovable que no genera emisiones de gas que puedan contaminar la atmósfera. Por último, un panel solar híbrido es capaz de generar de manera simultánea tanto electricidad como calor al ser capaz de aprovechar el espectro de la luz completamente.
Placas solares fotovoltaicas
Las placas solares fotovoltaicas son las encargadas de transformar la energía solar en electricidad. Este tipo de placas solares son cada día más económicas y se presentan como una excelente alternativa para generar electricidad tanto en hospitales, como colegios, comercios, viviendas, etc.
La producción de la energía va a depender directamente del nivel de iluminación, de tal manera que cuanto mayor cantidad de luz solar capte, mayor va a ser la intensidad eléctrica conseguida.
¿Cómo funcionan las placas solares fotovoltaicas?
Estos paneles se encuentran compuestos de unas células de silicio que mediante un proceso conocido como efecto fotoeléctrico, transforman la energía de la luz en energía eléctrica. De manera sencilla, cuando los fotones que componen la luz chocan contra el panel, en concreto contra su silicio, estos rompen los electrones liberando parte de ellos. Estos van a ser los encargados de generar la corriente eléctrica.
Placas solares térmicas
Una placa solar térmica también conocida como colector solar, permite que la energía que procede del sol se transforme en calor. Este tipo de paneles, además de usarse a nivel industrial y doméstico, también se utilizan para otras muchas cosas como la creación de vapor, climatización de las piscinas o para preparar agua para un uso sanitario.
¿Cómo funcionan las placas solares térmicas?
Un panel térmico contiene una mezcla de anticongelante y agua que rápidamente aumenta su temperatura cuando se encuentra expuesto a cualquier fuente de calor, en este caso, el sol. La mezcla de estos dos productos bombea hasta un intercambiador de calor que se encuentra normalmente en el depósito de agua. Cuando el calor del fluido se ha transmitido al agua, vuelve al sistema para recalentarse de nuevo.
Placas solares híbridas
Estas placas son el resultado de unir los conceptos de los paneles anteriores, es decir, es una mezcla de un panel térmico y uno fotovoltaico. De esta manera se puede producir calor y electricidad de manera simultánea. Se trata de un tipo de placa solar que en los últimos años está teniendo mucha aceptación por la gran cantidad de ventajas que ofrece. Una de ellas es la reducción del espacio que se necesita para poder aprovechar la energía del sol al unir dos paneles en uno único.
¿Cómo funcionan las placas solares híbridas?
Las placas solares híbridas van a tener dos fuentes distintas de energía. Por una parte están las placas fotovoltaicas que generan energía eléctrica de los rayos solares. Cuando la energía del sol no sea suficiente, o que en ese momento no sea demasiado rentable utilizarla, este sistema va a echar mano, normalmente, de diésel para generar la energía necesaria. Si en lugar de este combustible se combina la energía solar con eólica, el sistema será capaz de ir cogiendo, según su disponibilidad, de una o de otra.
Comparativa de placas solares
A la hora de adquirir una placa solar es necesario fijarse en algunos factores tan importantes como son la eficiencia y la garantía. Aunque la mayor parte de las personas solamente tienen en cuenta la potencia de la misma, lo cierto es que es un error. Esta deberá medirse en función del tamaño de los paneles, ya que cuanto más grandes sean, lógicamente mayor será la potencia que van a producir.
El factor clave no será la potencia a secas, sino la misma teniendo en cuenta el tamaño del tejado. El coeficiente de temperatura o la degradación también son importantes a la hora de diferenciar unas placas solares buenas de otras que no lo son tanto. El factor estético, aunque no es fundamental, puede ser algo a tener en cuenta a la hora de diferenciar entre distintas gamas de placas.
¿Cuál es el mejor tipo de placa solar?
Son muchos los expertos que coinciden en que un panel solar híbrido es el mejor tipo de placa que se puede conseguir. No en vano, son los únicos capaces de conseguir generar calor y electricidad de manera simultánea. De esta forma, se consiguen proporcionar agua caliente, calefacción y electricidad en un único panel. Además, instalando este tipo de placas solares se ahorra hasta un 30% de espacio si se compara con la implantación de un panel térmico y otro fotovoltaico.
Qué es mejor instalar: Placas solares o Aerotermia
Tanto las placas solares como la aerotermia son fuentes de energía renovables y se producen con fuentes inagotables de energía. Según tus necesidades y la zona donde residas, te vendrá mejor instalar placas solares o el sistema de aerotermia.
Las placas solares obtienen la energía de forma gratuita, son ecológicas, respetuosas con el medio ambiente, se pueden utilizar con otro tipo de energía y pueden alquilarse. Por otro lado, la aerotermia funciona mediante una bomba de calor, que según la temperatura del aire, puede calentarse o refrigerarse. Además, permite ahorrar entre el 60% y el 100% de la factura de la luz, son eficientes, funcionan con cualquier clima y se puede obtener tanto calefacción como refrigeración y agua caliente.
La energía aerotérmica necesita electricidad, por lo que contamina un poco más que la energía fotovoltaica. No obstante, ambas suponen un ahorro en la factura de la luz. Según el lugar en el que vivas y el clima, te vendrá mejor poner una u otra. Las placas solares se suelen poner en sitios con mucha radiación solar durante un largo periodo del año. El sistema de aerotermia puede funcionar con electricidad convencional. Lo ideal sería la combinación de ambas fuentes.
En viviendas de obra nueva es obligatorio un sistema u otro. La aerotermia, a la larga, es más económica que el sistema de placas, siempre que el hogar tenga instalación de suelo radiante o radiadores. Cada vez se está demandando más el sistema de aerotermia.
Por el contrario, el sistema de aerotermia no se suele demandar para pisos. Sin embargo, si el piso es grande y se instala suelo radiante, es recomendable instalar este sistema.
¿Tienes alguna duda sobre las placas solares o la aerotermia? ¿No sabes qué instalar tras la reforma de tu casa o con la nueva obra? Escríbenos y te aconsejaremos lo mejor para tu hogar. Te ayudamos a tomar las mejores decisiones. ¡Te esperamos!
